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19 septiembre 2008

Empleadas domésticas extranjeras en Líbano se suicidan para escapar de la esclavitud


Al menos 24 empleadas domésticas extranjeras han muerto en dicho país desde enero de 2007, lanzándose desde edificios altos para escapar de su confinamiento forzoso. Otras 40 se han suicidado de diferentes maneras. Ser extranjera y ejercer de empleada del hogar en Líbano se está poniendo cada día más caro.

Así lo afirma Nadim Houry, investigador de Human Rigths Watch, quien mantiene que mueren a un ritmo de una por semana en un informe (en inglés) sobre el abuso de las trabajadoras domésticas extranjeras en Líbano, un colectivo que se cuantifica en doscientas mil mujeres.

La causa son unas condiciones rayanas a la esclavitud, que pasan por el maltrato verbal o físico, jornadas maratonianas, impagos de salarios, ausencia de días libres, volumen de trabajo inhumano e incluso la negación del alimento. Muchas de ellas también sufren abusos sexuales.

Las mujeres llegan a través de agencias legales cuyas actuaciones son más propias de las mafias traficantes de personas. Algunas les requisan el pasaporte al llegar y las obligan a trabajar en su mes libre en otras casas y, si se niegan, las golpean y las encierran hasta que se resignan.

Las agencias de empleo de Beirut las promueven como mercancías o incluso como mascotas. Incluso se atreven a recomendar las nacionalidades de procedencia de las que son más fáciles de mantener y señalar a aquellas más difíciles de someter. Sus patrones suelen cambiarles sus nombres cristianos, para que puedan entrar en el país como musulmanas y sean más difíciles de rastrear.

La situación ha levantado tal grado de alarma que el gobierno de Etiopía se vio obligado hace unos meses a aprobar un proyecto de ley que prohíbe a las trabajadoras viajar a Beirut, tras realizar un estudio sobre las violaciones de derechos humanos y la violencia doméstica que habían sufrido trabajadoras etíopes en el Líbano. Se calcula que en Líbano trabajan unas 26.000 etíopes.

Vía | Global Voices

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