cabecera_tipográfica_trans

04 marzo 2008

Parque Dunar de Matalascañas; un paraíso natural que sobrevive al acoso turístico

Adentrarse en las 150 hectáreas del Parque Dunar de Matalascañas (Huelva) es como traspasar el umbral de un mundo virgen, donde los matices de los colores y las formas esculpidas por el viento, la luz única del sur y el silencio abrumador de los espacios abiertos están al alcance de la mano sólo con cruzar la calle.
Formando un acantilado de 10 metros de altura de este a oeste, y paralela al mar, se eleva una gran duna fósil de 18 kilómetros, que se extiende hasta la localidad de Mazagón, donde aún es posible encontrar vestigios de la vegetación mediterránea costera de la zona, así como una excelente representación de la fauna que coloniza este tipo de hábitat.

Integrado dentro del Parque Natural del Médano del Asperillo y de la zona de protección del Parque Nacional de Doñana, el Parque Dunar es uno de los mejores ejemplos de la sucesión vegetal en el proceso de colonización de una duna.

Espacio para la educación ambiental y la investigación

El terreno es propiedad del Ayuntamiento de Almonte, que comparte su gestión con la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía a través de la sociedad Parque Dunar. Este parque fue configurado como un espacio para la investigación, el ocio y la educación ambiental, en lo que en su día se imaginó como una nueva concepción de oferta turística y recreativa, basada en el aprovechamiento y conservación de los recursos naturales en el entorno de Doñana. Alberga también en su interior el Museo del Mundo Marino, un centro de acogida, que es el punto de referencia del visitante, el Centro Internacional de Estudios y Convenciones Ecológicas y Medioambientales (CIECEM), y la sede del Consejo de Energía Sostenible de Doñana.

Flora y Fauna

El Parque Dunar cuenta con once itinerarios temáticos de baja dificultad, que oscilan entre los 106 y 995 metros de longitud, y que recorren tanto el talud de la duna fósil, el más atractivo paisajísticamente, como la base de la misma, donde se encuentra un espectacular bosque de sabinas en excelente estado de conservación. La vegetación con la que cuenta el parque es la típica mediterránea costera, compuesta por pino piñonero, sabinas y enebros fundamentalmente. El bosque de sabinas, especie vegetal protegida que crece en el entorno de Doñana, muestra una interesante fauna y flora asociada formada por líquenes, labiérnagos, jarrillas moriscas, retamas locas y un buen número de hongos, algunos de ellos casi exclusivos.

En las zonas más áridas y despejadas abunda el “monte blanco”, llamado así por la presencia de jaguarzo, una planta que tiene una serie de pelillos blancos a lo largo del tallo y las hojas para protegerse de la desecación, y que proporciona a la zona ese color verde blancuzco característico.

La fauna en estado salvaje que se puede observar abarca una gran variedad de insectos, sobre todo escarabajos, las lagartijas colirroja y colilarga, urracas, currucas, rabilargos, jilgueros, verdecillos, conejos, zorros, tejoneras y hasta algún lince proveniente de la vecina finca de El Acebuche.

El bosque solar, un proyecto de I+D+I

Ubicado en el corazón verde del Parque Dunar, el bosque solar es una de las apuestas más innovadoras de la Fundación Doñana 21, que cuenta para este proyecto con la colaboración de la Agencia Andaluza de la Energía (AAE), Gamesa, y el Fondo Europeo de Desarrollo Rural (FEDER).

Está formado por veinte árboles compuestos por placas solares que generan entre 5 y 10 Kw. de producción eléctrica a partir de la energía solar fotovoltaica. Está previsto que alcance una potencia total de 100 kilovatios y que produzca más de 162.000 kilovatios al año, evitando la emisión de más de 60 toneladas de CO2 a la atmósfera cada añó. Cada uno de los árboles está patrocinado por una empresa o entidad colaboradoras del proyecto.

Las posibilidades que ofrece este entorno natural único son muy variadas, desde el senderismo por los itinerarios temáticos, hasta rutas en bici o a caballo. Un entorno privilegiado, situado a la orilla de uno de los destinos turísticos más demandados en la costa de Huelva, dada su cercanía con Sevilla, que recibe al año más de 35.000 visitas y se ha convertido en todo un referente de desarrollo sostenible en la zona.

5 comentarios:

Tanhäuser dijo...

No todo es destruir Naturaleza. A quien le toca actuar, también promueve iniciativas conservacionistas como éstas.
Un reportaje excelente.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Si todo va como espero, tengo previsto hacer un viaje en octubre por la zona de Huelva, Sevilla y Cadiz.
Ésta información me va muy bien para no dejar fuera de mi camino este parque dunar.
Buen trabajo de documentación, muy interesante conocer lo que se hace bien por parte de algunos.
Si te parece te haré llegar información de otros lugares que presentan tambien alternativas distintas.
Un beso, Jack

Gregorio Verdugo dijo...

Tanhäuser: un abrazo, me alegra verte por estos lares, amigo.
LP: cualquier información me vendrá de perlas, LP. Gracias por colaborar.

Anónimo dijo...

HOLA, QUE SITIO MAS BONITO !!!

!!L.D.L.M.Y.!!

Anónimo dijo...

Si señor, yo también creo que puede ser un ejemplo de espacio que sobrevive al acoso turístico y sobretodo de interpretación y educación para la sostenibilidad, no sólo por los valores naturales que encarna sino por la metodología y la profesionalidad de los educadores e intérpretes que trabajan en el Parque Dunar y en el Museo del Mundo Marino.
Yo voy frecuentemente.