“¿Dónde? ¿En qué escuela de periodismo les enseñan que tener la alcachofa en la mano da bula de crueldad? La noticia estaba en la pista, en el avión que ardía, en la comparecencia de las autoridades indicadas de informar sobre la tragedia, pero desde “los medios” se ordena a muchachitos y muchachitas que suelen empezar una entrevista a un premio Nobel de Física con un candoroso “dígame quién es usted”, a lanzarse a la caza de algo que venda, que asegure audiencia, que nuestro canal sea más visto que los otros porque eso “vende”, es decir: consigue más contratos de publicidad.”
“¿Qué siente el periodista de una agencia que dio por buena la información que hablaba de siete muertos? ¿De dónde sacó la información el corresponsal de otra agencia que aseguró que eran ocho? ¿Es que ya en ninguna escuela de periodismo enseñan que en casos como este, por sobre el mérito de la “primicia” está el dolor de las víctimas?”
Luis Sepúlveda en un artículo de obligada lectura en Público
Es evidente que la cobertura del accidente de Barajas traerá consecuencias impredecibles al periodismo y a la forma de ejercerlo. Si los medios son insensibles a lo que se ha convertido ya en un clamor de toda la sociedad civilizada, estarán cavando aún más profunda todavía su propia tumba.
El periodismo, como motor de la opinión pública que es, tiene la obligación y la responsabilidad ineludibles de orientarla desde la ética. Si los primeros en abandonar la ética que impone el sentido común son los propios medios, ¿cómo vamos a exigirles después a los ciudadanos comportamientos coherentes?
Hay que revisar a fondo el desempeño de esta profesión, hay que reconducirla hacia sus más nobles orígenes. Y hay que hacerlo cuanto antes.
22 agosto 2008
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1 comentario:
Hay que revisar a fondo el desempeño de esta profesión, hay que reconducirla hacia sus más nobles orígenes....
Bueno no estoy muy de acuerdo con ese planteamiento. Más bien diría que hay que reconducirla hacia el periodismo genuino.
Eso de los orígenes me suena al periodismo inmoral de Truman Capote y del Ciudadano Kane.
Es hoy, cuando se han conseguido algunos Códigos de ética de periodista -que nadie los trabaja por supuesto-.
Y es hoy cuando algunos países han colegiado a los periodistas, aunque no sé si para bien o para mal y es hoy cuando existen escuelas de comunicación social. Que de hecho plantean y se estudian los códigos de ética...pero afuera están los dueños de los medios. Y eso ya es otra cosa.
Bueno cordial saludo. Buen post reflexivo. De hecho lo que planteas se da en todos los países. Es como si estuvieses hablando de Venezuela....
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