El idilio de Magtel con las administraciones públicas

El romance idílico de la empresa cordobesa Magtel y su red societaria con las administraciones públicas ha saltado a la palestra a raíz de la controvertida concesión de la explotación minera de Aznalcóllar a una de sus filiales, Minorbis, por parte de la Junta de Andalucía.

Como consecuencia de la denuncia presentada por una de las empresas competidoras a la hora de adjudicarse el referido concurso, Emerita Rosources España SLU, sobre presuntas irregularidades en procedimiento de adjudicación y su investigación por la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Sevilla, Patricia Fernández, están apareciendo informaciones continúas sobre el importante volumen de ayudas, subvenciones y adjudicaciones públicas que ha obtenido dicha corporación mercantil de diferentes administraciones públicas, con independencia del color que las gobierne.

Ayer mismo se supo que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), encargada de la investigación de dicha adjudicación, investiga una madeja de 90 empresas ligadas a la empresa adjudicataria, Minorbis.

Según la información publicada en Voz Pópuli por los periodistas Óscar López-Fonseca y Antonio Maqueda, los investigadores entregaron al juez encargado del caso “un listado con las sociedades de las que forman par te los hermanos López Magdaleno”, apoderados de la mercantil radicada en Córdoba que se hizo con el concurso.

No es de extrañar, porque llama poderosamente la atención el elevado número de subvenciones e incentivos que ha obtenido la red societaria encabezada por Magtel, tanto de la administración autonómica como de la central. 

En sevillareport publicamos en su día que la trama societaria de los hermanos Magdaleno había recibido de la Junta de Andalucía más de 6 millones de euros en subvenciones y contratos, según los datos que figuran en la Plataforma de Contratación autonómica. Los años más prolíficos en dinero público fueron aquellos en los que contó con el asesoramiento de Andrés Luque García, antiguo miembro del PSOE en Córdoba, que fue Delegado Provincial de las consejerías de Empleo y de Innovación con Chaves y Director General de Innovación e Industrias culturales con Griñán. La mercantil cordobesa siempre ha negado que tal colaboración influyera en ese aspecto.

Pero además, hace pocos días Antonio Maqueda publicó que también el Gobierno de Rajoy había dado a la empresa cordobesa 27,9 millones de euros entre ayudas y subvenciones a través del Ministerio de Industria con cargo al programa concebido para extender la banda ancha de nueva generación. 

En la misma información el periodista resaltaba que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero también concedió otra ayuda de 9,2 millones a la misma corporación para el despliegue de la fibra óptica en diciembre de 2011, cuando estaba a punto de abandonar la Moncloa.

El matrimonio perfecto de Magtel con las ayudas, subvenciones y adjudicaciones públicas viene de lejos. Ya en el año 2006, el Ayuntamiento de Sevilla presidido por el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, le adjudicó casi 1,2 millones para las obras de nuevo cerramiento en el Colegio Público Manuel Canela y la rehabilitación de las Zonas Degradas de Mosquera de Figueroa, San Vicente de Paúl y Ancora.

En Junio de 2011, con Zapatero todavía en el poder, la Dirección General de Red.es la incluyó, junto a otras compañías, en el Acuerdo Marco para el "Suministro e instalación de pizarras digitales y proyectores", un programa dotado con 8,5 millones. Magtel estaba dentro del lote 3 dedicado a “Pizarras Digitales - Electromagéticas con Sistema de Sonido”.

También en marzo de ese mismo año, el Ayuntamiento de Puente Genil (Córdoba), le había adjudicado la construcción y explotación de un Centro Deportivo Urbano por algo más de 1,6 millones en una UTE con la constructora Canval.

Durante el año 2014, según la Plataforma de Contratación del Estado, las empresas Magtel se hicieron con un total de más de 4 millones en adjudicaciones procedentes de Enresa, Red.es y Adif. En este sentido destaca el contrato para el Suministro de fibra óptica para conectar la estación biológica de Doñana (Centro del CSIC) a la Red IRIS NOVA, dotado con más de 3,9 millones.

Además, ya en 2015, la corporación obtuvo otros 345.000 euros en adjudicaciones procedentes de la Autoridad Portuaria de Sevilla y de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, por diferentes actuaciones en los centros de transformación del Puerto de Sevilla y la comprobación, acreditación y legalización reglamentaria de las instalaciones de Alta y Baja Tensión de la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir, respectivamente. A ello habría que añadirle su importante implicación en el negocio de la energía eólica de este país. 

Un idilio que, además de beneficioso, tiende a perpetuarse en el tiempo.