Rosario Huayanca Zapata y el padre José
Manuel Miranda Azpiroz son activistas defensores de los derechos humanos en
Perú. Debido a su trabajo en el Comité de Derechos Humanos están recibiendo una
serie de amenazas que hacen temer por su seguridad. Sus vidas corren peligro.
El 4 de octubre pasado, el hermano de
Rosario Huayanca Zapata recibió una llamada telefónica en la que un desconocido
pidió hablar con su hermana. Al contestarle que ella no vivía allí el hombre
respondió: “dígale a Rosario Huayanca Zapata que llamó la muerte", acto
seguido colgó.
Ese mismo día, el guardia de seguridad
de la oficina del Comité de Derechos Humanos (CODEH) en la región de Ica, Perú,
encontró un sobre bajo un banco en la zona de espera de la oficina. El sobre
iba dirigido a ambos activistas y en su interior había cuatro balas y el
siguiente mensaje textual: "este es un aviso la prosima va al cuerpo, I
también para el padre $30, mil ote mueres".
El 8 de octubre, otros familiares de Rosario Huayanca Zapata -incluido su hermano- recibieron nuevas llamadas telefónicas. En una de ellas, un hombre que quería hablar con ella dijo: "su cabeza esta comprada y la van a matar".
Los dos defensores de los derechos humanos han denunciado las amenazas ante la policía, y parece que se ha abierto una investigación. Sin embargo, las fuerzas de seguridad se han negado a ofrecerles protección porque no han podido identificar a la persona responsable de las amenazas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario