Nuevo retraso en el pago de la nómina de Tussam

A Juan Ignacio Zoido, actual Alcalde de Sevilla, le empieza a pasar factura el peso de la palabra empeñada durante la campaña electoral. La nómina de la plantilla de Tussam está dando más quebraderos de cabeza de los previstos y vuelve a sufrir un nuevo y preocupante retraso, ante la imposibilidad de conseguir un préstamo que cubra las necesidades de la empresa para finalizar el ejercicio.

Varias secciones sindicales con representación en la empresa han emitido hoy diferentes comunicados a sus afiliados, bien por escrito o vía SMS, informándoles del nuevo retraso provocado por la paralización del crédito que se había solicitado a una entidad bancaria.

La solicitud de dicho crédito, por una cuantía que ronda los 11 millones de euros, fue aprobada en el último consejo de administración de la empresa celebrado el pasado mes de octubre y estaba destinado a dotar a la empresa de los recursos necesarios para poder finalizar el ejercicio con normalidad.

Según afirman en los comunicados, se han iniciado nuevas gestiones con otra entidad diferente, cuya comisión de riesgos se reúne el próximo jueves día 10 para valorar si procede o no a la concesión del mismo, lo que supone que el cobro de la nómina de octubre no se producirá hasta el próximo día 15 de noviembre como muy pronto.

Ante los graves perjuicios que dicho retraso ocasiona en la economía de la plantilla, los sindicatos han instado a la dirección de la empresa a que ingrese al menos un anticipo de una cuantía entre 500 y 600 euros a cada trabajador.

Cuando se produjeron retrasos similares al final del mandato del equipo de gobierno anterior, que coincidieron en buen número con el desarrollo de la campaña electoral, Zoido no dudó en aseverar en más de una ocasión que cuando él fuera Alcalde este tipo de irregularidades cesarían de inmediato.

Hoy, ya al frente del consistorio, las dificultades han vuelto a hacer acto de presencia pero con mayor gravedad si cabe, ya que este nuevo incumplimiento es el que más se ha prolongado en el tiempo de los habidos y se produce cuando la empresa se encontraba inmersa en plena negociación de un plan de viabilidad con los representantes sindicales, que los sindicatos han suspendido unilateralmente hasta que la situación vuelva a la normalidad.

El problema se agudizará sobre manera si la segunda entidad bancaria también opta por la denegación del crédito, ya que supondría la acumulación de dos nóminas consecutivas pendientes de pago. Algo que jamás ha sucedido en la larga trayectoria de la empresa de transportes urbanos.