El eje peatonal que atraviesa el casco histórico de Sevilla parecía ayer tarde la tórrida confluencia de una cuenca de ríos de caudal humano. Alcanzar el Bobo Restaurante Café, en la Alameda de Hércules, para asistir al encuentro de twitteros sevillanos con el portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento, Juan Espadas, se antojaba una tarea de titanes.
El centro tendrá mucho toldo, pero cuando el Lorenzo sevillano impone su ley hasta ellos resoplan y no me extrañaría que, cualquier día, levanten el vuelo y se fueran con el viento fresco a otra parte.
El objeto del encuentro era intercambiar impresiones sobre Open Goverment y sobre el aprovechamiento de las sinergias generadas en las redes sociales por la política local. Algo nada complicado, como sabéis.
Como en toda reunión que se precie y se hable de política, se acabó abordando la incidencia del Movimiento 15-M en la política actual y las posibles fórmulas existentes para intentar canalizar de alguna manera sus exigencias. De oca a oca y tiro porque me toca, más o menos.
Del sexo de los ángeles y del ciclo reproductor del escarabajo de la patata se pasó por las apreturas de agenda de Espadas, que tiene que multiplicarse dado el insuficiente número de concejales con que le obsequiaron las urnas. El hombre también tiene derecho a descansar.
Asistieron alrededor de veinte personas y un periodista, Pablo Fernández, de Diario de Sevilla, cuya crónica recomiendo. Yo iba como espectador, si es que tal categoría existe, aunque tirase de cámara de fotos, cuaderno de a cuadros y estilográfica kilométrica, más por costumbre que por otra cosa. Así es como se engendran los vicios, con ausencia generalizada de porqués.
Estaban presentes gente del equipo de comunicación de Espadas, como Rosa LLacer, Manolo Vargas o Pilo Martín e ilustres twitteros con ingentes cantidades de followers tales como Bomarzo, Hervella, 7vueltas, Xiomapi, Mernisi, José Manuel Boza, y seguro que me dejo a bastantes sin nombrar (los tuyos por si acaso).
En definitiva un nutrido y variado amalgama de patas de banco pegadas cada una a un smatphone, deseosas de contar lo que allí sucedía bajo el hashtag #crono y el ya inmortal #sevillahoy, vertedero oficial de cuanta crítica, loa, exigencia, vituperación o parida se efectúa sobre la ciudad y sus dirigentes y políticos en general. Incluso un ausente presente (como los ángeles) Javier Bonilla, todavía convaleciente y siempre añorado. Tras las cristaleras que daban a una Alameda ensombrecida se podía apreciar a la gente de la red comentando lo que allí sucedía.
Espadas aprovecho la ocasión para presentarnos El cronómetro, una herramienta virtual para hacer un seguimiento del grado de cumplimiento de las promesas del Alcalde, Juan Ignacio Zoido, mediante la que pretende “hacer sentir el aliento y la presión de la ciudadanía” en el cogote del Gobierno local, para que no se olvide nunca de que “aquello que prometió debe ser cumplido”.
Un movimiento mediante el que pretende tomar la iniciativa en temas de Open Goverment y alejar el fantasma de que los políticos sólo se acuerdan de las redes cuando se encuentran asfixiados por la marejada de la campaña electoral, cosa que por otra parte es cierto en un buen número de ocasiones.
La grata experiencia obtenida con la puesta en marcha del buzón del ciudadano que los socialistas lanzaron hace unos meses, les ha llevado a esta nueva aventura en la red a la que denominan “oposición abierta”. Mediante su utilización pretenden canalizar de una forma más efectiva las denuncias de los sevillanos que utilizan habitualmente las redes sociales y hacer una especie de seguimiento del progreso de las mismas.
En palabras del propio Espadas, “intentar vincular la participación ciudadana con los mecanismos de decisión del Gobierno municipal”. Una herramienta que el grupo socialista pretende utilizar incluso para someter a votación entre los internautas las preguntas que el grupo va a elevar a pleno o para la creación de comunidades virtuales in situ, en los distritos y barrios de la ciudad, mediante las que ofrecer respuestas a las problemáticas de cada uno.
Se trataría de una especie de Intranet a nivel de barrio, para interactuar con los vecinos y las asociaciones que operen en la zona y otorgar el tratamiento adecuado a los problemas. Aunque Espadas reconoció que en estos temas no puede haber inmediatez en la solución, pero sí un caudal de trabajo importante.
Este tipo de herramientas, que Espadas defiende que para quien de verdad son útiles es para el Gobierno de la ciudad, están destinadas a tomar el pulso de la vida ciudadana y a provocar debates sobre los temas de actualidad más candentes.
Según el portavoz del grupo socialista, “al gobierno local hay que exigirle no sólo que el Alcalde twittee. Hay que pasar a la fase 2; montar una estructura de atención a los problemas que se plantean desde la red”.
Como ejemplo puso el caso de la barriada de Bami y la problemática de los gorrillas, reflejado en las quejas recibidas a través del buzón del ciudadano. “En Bami ya tenemos quejas de que lo de los gorrillas fue cosa de cuatro días” afirmó.
En cuanto a la charla sobre el 15-M, mejor que yo os la cuente y haga este post eterno, os dejo un audio con lo más exquisito de ella. Yo, nunca mejor dicho, me lo pasé pipa.
1 comentario:
Personalmene creo que se hace un lío no. Dice que las minorías no pueden tener tanto poder, y por otro lado dice que las mayorías no cambiar las cosas. Los del PPSOE siguen liados sin tener las cosas claras. ¿Tan dificil es la política?
Publicar un comentario