SINDEscargas, en misa y repicando

González-Sinde, la todavía ministra SGAE, ese paladín del lobby que pretende copar en exclusiva la explotación monetaria de la cultura, quiere estar en misa y repicando. Primero nos llama a todos piratas y saqueadores, y luego, cuando ve que la metedura de pata ha sido supina y ha conseguido el rechazo de toda la red a su nombramiento, afirma que también le preocupa que sigan aumentando los contenidos culturales en Internet. Ésta, además de monaguillo, imparte la misa.

Tras insistir en que escuchará a todos los usuarios de Internet, cosa que cuanto menos pongo en duda, ha afirmado que "al mismo tiempo que se está haciendo un gran esfuerzo en cinematografía, con nuevas leyes, nuevos fondos, no se puede, simultáneamente, ir perdiendo espacio en los contenidos de la red". Me lo expliquen.

Lo de las nuevas leyes y, sobre todo, los nuevos fondos para proteger a una industria que plantea serias dudas está meridianamente claro. Lo que no acabo de comprender es la cuestión de “ir perdiendo espacio en los contenidos de la red”.

Yo tenía entendido que en la Red cabemos todos, eso que llaman la era de la abundancia, hasta tal punto que cuesta trabajo distinguir el ruido de las voces. Pero no, al parecer estaba equivocado, porque ahora la ministra me dice que el espacio en los contenidos se pierde, como las apuestas en el mus, y probablemente para siempre.

Miedo me da como le dé por hacer una ley para recuperar la patria virtual perdida, porque entre el frente anti-piratería y las regulaciones para distribuir a su entender el espacio invadido por enemigos fantasmas, igual acaba echándonos a todos para siempre de la Red.

Está claro que a esta ministra vamos a tener que explicarle muchas cosas todavía, entre ellas que el espacio en la Red se pierde, en primer lugar, porque no se comprende ni su espíritu ni su finalidad más inmediata. No me extraña que dicha pérdida le pueda sorprender a quien no entiende, porque ni quiere ni le interesa, que la esencia de Internet es compartir sin ánimo de lucro, sólo por el mero hecho de ampliar conocimientos y cultura.

Cuando desde el planteamiento contrario se plantea la cuestión del espacio de los contenidos y la posible recuperación de la pérdida del mismo, mucho me temo que de lo que se está hablando es de una reconquista en toda regla, a las bravas y mediante la fuerza. Porque de quien es incapaz de comprender la esencia de la red no se puede esperar otra cosa.