Kyaw
Hla Aung, defensor de los derechos humanos de 74 años, lleva detenido
arbitrariamente en la comisaría de policía número 1 de Sittwe, en el estado de
Rajine (Myanmar), desde el 15 de julio de 2013. Kyaw es hipertenso, sufre
problemas gástricos y necesita medicarse regularmente. Se teme que pueda no
tener acceso al tratamiento médico que necesita o a un abogado de su elección y
que las condiciones de detención no cumplan las normas internacionales de
derechos humanos.
Kyaw
Hla Aung se ocultó por temor a ser detenido desde que las autoridades de
Myanmar arrestaron a varios líderes musulmanes, tras unas protestas
comunitarias contra un censo de población ordenado por el gobierno en el estado
de Rajine en abril de 2013.
Las
tensiones surgieron cuando miembros de la comunidad rohingya se negaron a
identificarse como "bengalíes". Dicho término es considerado por
muchas personas como segregador y es utilizado para negar el reconocimiento a
la comunidad rohingya en Myanmar y dar a entender que todos sus miembros son en
realidad migrantes de Bangladesh. Las protestas obligaron a las autoridades a
suspender el censo.
Kyaw
Hla Aung no participó en ellas, sino que intentó ponerse en contacto con otros dirigentes
musulmanes para evitar que derivaran en violencia. Se cree que se ha ido contra
él por ser un influyente defensor de los derechos humanos de los rohingya con
relaciones con la comunidad internacional.
El
pasado 15 de julio, un agente de policía y dos funcionarios sin uniformar se
llevaron a Kyaw Hla Aung del lugar donde se refugiaba temporalmente en Sittwe a
la comisaría de esta localidad para interrogarlo. La policía no le informó de
los cargos contra él.
El
31 de ese mismo mes lo llevaron ante el Tribunal de Distrito de Sittwe y lo
acusaron en aplicación de los artículos 148 (participar en disturbios con arma
letal), 150 (convocar o contribuir a convocar personas para participar en una
reunión ilegal) y 333 (causar voluntariamente lesiones graves a un funcionario
público para impedir que cumpla con sus obligaciones) del Código Penal de
Myanmar.
El
juicio se reanudará el próximo 14 de agosto. El activista continúa detenido en
la comisaría de Sittwe,. Según fuentes fidedignas, no ha sido visto por ningún
médico y las autoridades no le facilitan las medicinas que necesita. Además, no
tiene acceso a agua potable ni tampoco para asearse, y a sus familiares no les
han permitido verlo bajo custodia.
Kyaw Hla Aung, destacado abogado rohingya y ex miembro del personal de una organización no gubernamental humanitaria. Ha pasado más de 16 años en las cárceles de Myanmar por participar en actividades pacíficas, y sigue vigilado y acosado por las autoridades. La última vez ocurrió cuando fue detenido arbitrariamente en junio de 2012 junto con varios trabajadores de ayuda humanitaria rohingyas tras unos incidentes de violencia entre las comunidades budista y musulmana en el estado de Rajine. Quedó en libertad en agosto de 2012.
En Myanmar, los activistas y los defensores de los derechos humanos pacíficos se exponen a ser detenidos arbitrariamente y hostigados. Los detienen y encarcelan simplemente por participar en actividades pacíficas. Además sufren intimidación y acoso. Los presos de conciencia y otras personas detenidas en Myanmar corren peligro de sufrir tortura y otros malos tratos, y muchos están recluidos en malas condiciones que no cumplen las establecidas en la legislación internacional.
Desde
hace décadas los rohingya sufren discriminación en Myanmar. No se les reconoce
como grupo étnico oficial y se les niega el acceso en pie de igualdad a los
derechos de ciudadanía. Sus derechos a estudiar, trabajar, viajar, casarse,
practicar su religión y recibir servicios de salud tienen diversos niveles de
restricción.
1 comentario:
Verdaderamente impresionante...
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