El hashtag #sevillahoy es una ventana en Twitter donde solemos asomarnos asiduamente todos los periodistas de Sevilla. A través de sus hojas abiertas de par en par pulsamos la actualidad de la política sevillana, porque todos los equipos de las diferentes formaciones de la ciudad vuelcan a través de ella sus contenidos, críticas, propuestas o comentarios sobre lo que se está cociendo en la política local.
Es una herramienta inmejorable para estar al día de lo que acontece y, además, expande horizontes, porque allí todos nos conocemos y sabemos quiénes somos cada uno.
Como en todo debate en el que se cruzan ideas y posicionamientos, a veces se producen situaciones tensas en las que se vierten acusaciones unos contra otros y se tiran a la cara los trapos sucios sin ningún tipo de miramientos. Es lo normal en la confrontación política de hoy, aunque rara vez se pierden las formas, o al menos no de una manera que deba preocupar a quienes por allí transitan. Las hostias virtuales no suelen provocar dolor.
Hoy ha sido uno de esos días en los que la contienda política ha alcanzado la temperatura idónea para este tipo de situaciones con motivo del Pleno Extraordinario sobre el empleo que se ha celebrado en el Ayuntamiento de Sevilla. La tensión se palpaba en la red de los 140 caracteres.
Izquierda Unida ha presentado un plan de choque contra el paro en dicho pleno y con toda rapidez sus seguidores se han lanzado a publicitarlo y retuitearlo a través de la red. Es lo que se suele hacer en estos casos y de hecho así sucede cada día.
El Partido Popular lo rechaza de inmediato por “motivos ideológicos” y por “falta de dinero”. A partir de ahí, la cosa comienza a calentarse a base de cruce de mensajes.
Los socialistas comienzan a reclamarle a Zoido que actúe ante una emergencia como la del alto nivel de paro que azota a la ciudad. El equipo de Izquierda Unida recrimina a los populares que crear empleo no tiene nada que ver con la ideología. Éstos reprochan a Torrijos que pida ahora lo que no fue capaz de hacer durante ocho años de gobierno. A esas alturas el debate se acelera y los tuits se suceden casi sin que dé tiempo a leerlos todos.
La estrategia del Partido Popular en el gobierno de culpar a la anterior corporación de todos los males de la ciudad tiene su fiel reflejo en el debate y comienzan a enviar enlaces de artículos de prensa sobre el caso Mercasevilla. Ya está liada, por un momento la red se remonta a la campaña electoral de las pasadas municipales.
La respuesta de los adversarios no se hace esperar y el debate se enciende todavía más. Les acusan de hacer oposición a la oposición desde el gobierno mientras los populares insisten con el sonsonete de las mariscadas a costa de los sevillanos de Torrijos. Otros argumentan que no es tiempo de mirar atrás y volver a sacar toda la artillería de la campaña electoral. Pero ellos recurren a la libertad de expresión para defender sus afirmaciones.
La propuesta que a su vez ha presentado el PSOE dicen los populares que ya la planteó el PP hace cuatro años. Los socialistas les afean que ahora voten que no. Al poco rato, Zoido acepta una propuesta del pleno y los socialistas ironizan asombrados ante tal dispendio.
En este punto, los de Izquierda Unida acusan a los populares de injuriar con el tema de la mariscada de Torrijos y critican su actitud. Éstos les recuerdan que “su Delegado de Empleo generaba empleo en piquetes violentos contra empresas sevillanas”. De nuevo una dosis de enlaces de prensa. En el rifirrafe incluso sale un medio mal parado.
Al final todo se apacigua con unas almendritas virtuales y el debate vuelve a su cauce habitual. Aunque a algunos les cueste abandonar el tono cachondo. Las aguas retornan por fin a la normalidad.
En realidad, apenas se han desbrozado las propuestas concretas que se han debatido en el Pleno, aunque tal vez eso importe poco a estas alturas. Lo que no saben quizás ninguno de ellos es lo divertida que nos han hecho a todos una tediosa mañana de sorteo de una lotería que jamás nos va a tocar. Es de agradecer, dada las altas dosis de desilusión que circulaban por la red a esas horas.
Lo sucedido hoy hace aún más interesante el prometido encuentro analógico de todos los que solemos transitar por las autopistas de #sevillahoy, un tweets and beers siempre postergado, aunque en el fondo todos estamos deseando que se celebre para intercambiar impresiones y compartir buenos momentos. Quizás el año próximo haya más suerte. Desde aquí animo a todos a ello.
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