Informar
tiene sus peligros —y muy graves—, sobre todo si a quienes ostentan el poder no
les gusta el trabajo que haces. Que se lo pregunten si no a Mohamed Fahmy,
Peter Greste y Baher Mohamed, tres periodistas de Al Yazira que están siendo
juzgados en Egipto acusados de emitir noticias falsas y tener vínculos con un
movimiento prohibido, la Hermandad Musulmana.
Tanto
Fahmy, de origen egipcio-canadiense, como Greste, un australiano, fueron detenidos el 29
de diciembre de 2013 por la noche en el hotel Marriott de El Cairo. Por su
lado, Mohamed —egipcio— fue detenido en su casa esa misma noche. Su juicio
comenzó el 20 de febrero y se reanudó el 10 de abril en el Instituto de la
Policía de Tora, adyacente a la prisión del mismo nombre, donde se encuentran
recluidos.
A esto hay que añadir que las autoridades niegan a Fahmy la debida atención médica para una lesión de hombro que sufrió días antes de su detención. Como consecuencia de meses de malas condiciones de reclusión y falta de la debida atención médica, la lesión ha empeorado y al periodista le cuesta ya mover el brazo.
En la misma causa también están siendo juzgados los estudiantes egipcios Sohaib Saad Mohamed, Khaled Mohamed Abdel Raouf, Shady Abdelhamid, Ahmed Abdelazim y Anas Mohamed El Beltagy, detenidos el 31 de diciembre de 2013. En la última vista, celebrada el 31 de marzo, tres de los estudiantes dijeron al juez que las fuerzas de seguridad los habían golpeado durante su detención. Éste ordenó a peritos del Servicio Médico Forense que examinasen a Mohamed Fahmy y a los estudiantes que aseguran haber sido golpeados.
Un total de 20 personas están siendo juzgadas en
esta causa, a 12 de ellas in absentia (en
ausencia o rebeldía). Todas están acusadas de emitir noticias falsas y
pertenecer al movimiento de la Hermandad Musulmana o colaborar con él, pese a
haber sido prohibido por orden judicial en septiembre de 2013 y calificado por
las autoridades de "organización terrorista" en diciembre.
Sobre los acusados extranjeros pesa también el cargo de estar en posesión
de "material prohibido", aparentemente con objeto de falsificar las
noticias.
Las fuerzas de seguridad detuvieron a los estudiantes egipcios el 31 diciembre del pasado año; a dos, en un apartamento de Ciudad Nasr, y a los demás, en un piso de Mokattam, barrio de la periferia de El Cairo. También están siendo juzgados otros cinco ciudadanos egipcios en rebeldía.
Nueve de los acusados son miembros del personal de Al Yazira, según ha explicado la red de telecomunicación. Son, además de los tres hombres detenidos, los periodistas británicos Dominic Kane y Sue Turton y cuatro empleados egipcios radicados en Qatar. Todos ellos están siendo juzgados in absentia. Una periodista neerlandesa también acusada y que no trabaja en Al Yazira se marchó de Egipto al saber que iba a ser juzgada.
Mohamed Fahmy sufrió una fractura de brazo, a la altura de la articulación del hombro, días antes de su detención en diciembre. Las autoridades lo llevaron a un hospital público para que le hicieran un escáner el 22 de marzo, tras haberlo pedido su familia durante meses, pero ese mismo días lo devolvieron a la prisión de Tora.
Las autoridades egipcias han adoptado medidas represivas contra la red de Al Yazira, así como contra otros medios de comunicación considerados afines a la Hermandad Musulmana y al presidente depuesto Mohamed Morsi. En los últimos nueve meses, Al Yazira ha informado de varios incidentes en los que las fuerzas de seguridad han detenido a miembros de su personal o irrumpido en sus oficinas.
El 3 de
septiembre de 2013, un tribunal administrativo prohibió el canal egipcio de la
red, Al Yazira Mubasher Misr, así como otros tres canales considerados en
general afines a la Hermandad Musulmana. Las fuerzas de seguridad filmaron la
detención de Mohamed Fahmy y Peter Greste y emitieron luego el vídeo en la
televisión egipcia, con objeto de difamar a los periodistas.
Las autoridades mantienen aún recluido sin cargos ni juicio al periodista del servicio en árabe de Al Yazira, Abdullah al-Shami, que fue detenido el 14 de agosto de 2013. Está en huelga de hambre desde mediados de enero para protestar por su prolongado encarcelamiento.
El presidente de Egipto, Adli Mahmoud Mansour, ha escrito a las
familias de Mohamed Fahmy y Peter Greste para decirles que está intentando
resolver la situación. Tanto Peter Greste
como Mohamed Fahmy han escrito desde la prisión para describir las malas
condiciones de reclusión y refutar los cargos formulados contra ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario