No he querido patearme la playa a conciencia, pero justo delante de donde me encontraba, a las puertas de uno de los chiriguitos que tanto le gustan a Rajoy, y casi sin moverme he podido localizar alguno de los restos del vertido de CEPSA en la playa de Matalascañas (Huelva), justo en la linde del Coto de Doñana.
tampoco yo,pues me pondría a decir muchos tacos.
ResponderEliminarS.: la verdad es que hay bastantes.
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