Cuatro defensores de los derechos humanos del movimiento juvenil “Lutte pour le Changement” (Lucha por el cambio o LUCHA) fueron puestos en libertad bajo fianza el pasado 29 de abril por orden del Tribunal de Apelación de Goma, República Democrática del Congo (RDC). Estaban detenidos por organizar una pitada simbólica para pedir la libertad de cinco compañeros recluidos en un lugar secreto.
Tresor Akili, Vincent Kasereka, Gentil Mulume y Sylvain Mumbere, miembros de dicha organización de jóvenes activistas habían sido arrestados el pasado 7 de abril cuando preparaban un “filimbi” o acción con silbatos. Los miembros de LUCHA organizaban una acción simbólica diaria en la que pedían a la gente que hiciera sonar silbatos desde las 5 de la tarde hasta las 5:05 para exigir la puesta en libertad de sus colegas, recluidos en detención secreta en Kinshasa desde el 15 de marzo.
Los cuatro defensores de los derechos humanos fueron detenidos en Goma, en la rotonda de Deux Lampes, lugar en el que explicaban a los transeúntes en qué consistía la acción y distribuían silbatos a las personas interesadas. El 13 de abril, el fiscal firmó una orden de detención preventiva y acusó a los activistas de "menoscabar la seguridad nacional, incitar a la rebelión, distribuir panfletos y participar en manifestaciones ilegales".
Fueron trasladados a la prisión de Munzenze de Goma ese mismo día. El 25 de abril, el Tribunal de Apelación revocó la decisión de un tribunal de primera instancia de Goma que les había denegado la libertad bajo fianza. No obstante, debido a trabas administrativas, los cuatro defensores de los derechos humanos no fueron liberados hasta el 29 de abril por la tarde.
La acción “filimbi” tenía por objeto pedir a las autoridades de la República Democrática del Congo (RDC) la puesta en libertad de al menos cinco activistas de derechos humanos que se hallan en detención secreta en Kinshasa, a raíz de que unos agentes de los servicios de seguridad irrumpieran violentamente en una conferencia de prensa celebrada el 15 de marzo en el centro juvenil de Eloko Makasi en Masina, Kinshasa, RDC.
Unas 30 personas fueron detenidas en aquel momento, entre ellas activistas del movimiento senegalés Y’en a Marre y del grupo burkinés Balai Citoyen, así como un diplomático estadounidense y periodistas que asistían a la conferencia de prensa. El diplomático estadounidense y los periodistas extranjeros quedaron en libertad el mismo día, mientras que los activistas de Senegal y Burkina Faso fueron expulsados posteriormente.
Un número indeterminado de activistas congoleños, incluido Fred Bauma, representante de LUCHA en la conferencia de prensa, permanece recluido en lugares secretos. Desde su arresto el 15 de marzo, no han podido acceder a asistencia letrada ni se les ha permitido recibir visitas de sus familiares. Sigue sin conocerse la ubicación exacta de su lugar de detención.
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