cabecera_tipográfica_trans

24 enero 2013

En estado catatónico


Que los sevillanos nos mareamos contemplándonos el ombligo es algo que ya se puede calificar sin lugar a dudas como milenario. Y debe ser contagioso, porque a poco que eches un vistazo a lo largo y ancho de todo el país la cosa no difiere demasiado.

La Encuesta de Población Activa (EPA) que se ha hecho pública hoy es tan contundente como dramática. España rozando los seis millones de parados, casi dos millones de familias con todos sus miembros en paro. Andalucía, para no ser menos, es la comunidad que lidera el terrorífico ranking con 1,5 millones de desempleados y una tasa de 10 puntos por encima de la media nacional.

Sevilla, donde tenemos de manera permanente la vista un poco más abajo del estómago, alcanza ya los 302.500 parados con una tasa del 32,56%. Casi cuatro de cada diez sevillanos no tiene empleo y, lo que es peor, casi ni futuro.

A esto se le ha de sumar el denigrante espectáculo de nuestros políticos echándose unos a otros las culpas de tan espeluznante sangría y sin atreverse a coger el toro por los cuernos, mientras la población se hunde en la desilusión y una apatía letal.

Y ante esa realidad tan apabullante y demoledora aquí nadie hace nada, nadie mueve un solo dedo y esto sigue sin explotar todavía. La ciudadanía se pudre en debates tan innecesarios como inútiles como el del uso de la imagen de la Macarena en la portada de una revista satírica y sacando 14 pasos se la semana santa en un vía crucis que recorrerá toda Sevilla como única solución.

Como si estuviéramos en estado catatónico, vamos. Para llorar.

No hay comentarios: