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25 octubre 2009

El Grupo Prisa y la información sobre Honduras









El reportaje titulado “Honduras: manual para un golpe de estado” que realizó Jon Sistiaga para Cuatro, y al que pertenecen estos vídeos, está levantando ampollas allende el océano.

Desde tercera información se tilda al reportaje de “manual de desinformación” y se hace una descomposición minuciosa de las afirmaciones que aparecen en el mismo con su correspondiente crítica y argumentación contraria. En dicho artículo se lanza una grave acusación al medio del Grupo Prisa de actuar con la intención de “manipular, ocultar datos y tergiversar información” y de intentar instalar en la opinión pública española la idea de que “el legítimo presidente de Honduras es el golpista Micheletti”.

Según otros medios, como Astubulla, esta actitud respondería a la defensa de determinados intereses del Grupo Prisa por aquellas latitudes, que explicarían el hecho de que “José Obdulio Gaviria, primo hermano del mafioso antioqueño Pablo Escobar Gaviria, pariente del presidente de Colombia, Uribe Vélez, y periodista destacado del Grupo Prisa y Planeta, gestiona negocios de abastecimiento al gobierno golpista de Honduras”.

Este periodista escribió un artículo en el diario El Tiempo bajo el título “La macolla chavista” que también levantó una polvareda de polémica por su peculiar forma de interpretar el golpe de estado de Micheletti.

Desde ANNCOL se acusa a Prisa de estar involucrada a través de Carlos Slim, socio directo del Grupo, de transportar en aviones privados a los paramilitares colombianos rumbo a Honduras”. Dicha operación ha sido denunciada incluso por la ONU y es coordinada por Mario Montoya, general paramilitar antioqueño y actual embajador de Uribe en República Dominicana, al que se acusa de convertir la embajada de Colombia en Santo Domingo “en un bunker de espionaje con alta tecnología norteamericana para controlar el espectro, los mares y todo el territorio de Honduras. Hay que destacar que Carlos Slim es propietario de una gigantesca red de emisoras de habla hispana que extiende por México, Centro América, el Caribe y Suramérica.

Vincenç Navarro, Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra y profesor de ‘Policy Studies’ en The Johns Hopkins University, escribió al respecto un artículo en Publico titulado “Las falsedades sobre Honduras”, donde ya denunciaba esa maniobra de la derecha que intentaba justificar el golpe difundiendo el erróneo mensaje de “casi nadie en Honduras quería al depuesto presidente Zelaya y que muy pocos desean ahora su vuelta a la Presidencia de aquel país”, cosa que la propia implantación del estado de sitio se encargó de desmontar.

Vía |Im-pulso



7 comentarios:

Im-Pulso dijo...

Excelente y oportuna información.
Escribí ayer sábado un post sobre la decepción que para mi ha supuesto el reportaje de Sistiaga, al que pese todo creo que debemos respetar profesionalmente; pero veo que el meollo del asunto está en que Prisa-Cuatro tiene una estrategia económico-empresarial, ¡también en Honduras!, como en Bolivia, Venezuela, Ecuador, Argentina...
Los periodistas somos, cada vez más, marionetas; salvo los que se prestan a lo que sea y los que tienen familia, la obligación de comer y que ganan menos de 1.500 euros al mes, ¡que son la mayoría!
Y encima hay quien confunde empresa y trajador, y demanda que el asalariado malpagado sea objetivo, ¡como va a ser objetivo un tipo que gana 1.400, 1.100 e incluso sólo 800 euros al mes! (esto último en la radio es bastante normal). No es el caso de Sistiaga...
La ciudadanía se ha quedado con la imagen de que el periodista es el "profesional liberal" que sale en las tertulias de TV que cobra una fortuna por decir cuatro coaas (a veces, demasiadas, simplezas).
Saludos.

Gregorio Verdugo dijo...

Félix, fue precisamente la lectura de tu post la que me llevó a indagar por ahí y encontrar esta información. Yo respeto mucho a Jon Sistiaga, me parece un profesional excelente. Pero el que paga, paga, y a veces los buenos sueldos tienen estas cosas. La entrada de Slim en Prisa me chocó bastante, es una de esas circunstancias que hacen mella en la línea editorial de un medio.
Espero que algún día la situación de los periodistas cambie para bien y creo que Internet nos puede echar un buen cable en ello.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Una vez más, los medios son críticos menos con los intereses que le afectan. ¿Conocéis a alguno que se haya hecho el "harakiri" por honradez profesional? Sólo trabajadores enloquecidos, amantes de la profesión, prefieren la inanición a quebrar su dignidad ética. Su heroicidad es tan valiente como peligrosa, condenada a ser luz atractiva pero fugaz. Me temo.

Gregorio Verdugo dijo...

Anónimo: yo sigo teniendo esperanza de que dicha situación se tercie para bien de los periodistas y de la sociedad.

Im-Pulso dijo...

AL ANÓNIMO,
Lo único que le ruego es que no confuda a los periodistas con los propietarios de los medios. Gracias.

Gregorio Verdugo dijo...

Félix, una excelente matización.

Anónimo dijo...

A FELIX SORIA:
No los confundo, pero, como usted mismo describe, a veces de tanto ser marionetas los periodistas se pliegan completamente a las directrices de la empresa hasta conformar su rostro reconocible. ¿Cómo distinguir entonces entre periodistas y empresa, si yo soy un simple lector que los sigo por lo que escriben en el medio en que lo hacen?