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23 septiembre 2009

Testigo y parte de los hechos

“Vivir con los aventureros, delincuentes o marginales y ser testigos de sus formas de vida y hechos para después contarlos es consustancial al periodismo moderno. Y a este, a su vez, le es consustancial el sensacionalismo abiertamente explotado o rozado. La voluntaria o involuntaria exaltación de lo que se cuenta -transformando a los antiguos pistoleros en héroes o a los actuales pequeños delincuentes en víctimas de la marginación- también es consustancial a este tipo de periodismo que conoce casi infinitas variantes. El negocio está siempre tras ello; y la explotación de lo morboso, también. Pero sin negocio no hay prensa libre; y los límites entre la denuncia, el testimonio y la espectacularización morbosa son muchas veces imprecisos.”

Más en “El narrador implicado”.

Me parece que una cosa es ser testigo de los hechos y otra muy diferente prestar la colaboración necesaria para que los hechos se produzcan. Es como el periodista que provoca la noticia, que la fabrica artificialmente para conseguir la exclusiva. Aunque es una práctica que tiene su recorrido en esto del periodismo, no creo que tenga nada que ver con él.

Se debe ser notario de la actualidad, pero nunca juez y parte. Y lo que estaba haciendo Samanta Villar en las chabolas de El Vacie en Sevilla se puede considerar un trabajo testimonial sobre una determinada realidad, pero no es necesario sostenerle la pistola al atracador mientras va al servicio para cubrir la noticia.

6 comentarios:

Im-Pulso dijo...

Suscribo tu reflexión. La iniciativa de la periodista de marras (y de quienes amparan y costean ese programa de TV) carece de justificación informativa, aparte de que el episodio del "robo" --el juez dirá-- es chusco y patético.

Anónimo dijo...

Esto es lo que pasa cuando en vez de cubrir las noticias, lo que se pretende es venderlas...

Gregorio Verdugo dijo...

Félix: la verdad es que la idea del programa me parece un poco cutre, dicho sea con todo el respeto.

Gregorio Verdugo dijo...

Coyote: efectivamente, aquí pesa más el negocio que la información.

TIZONA dijo...

Y esé es el negocio... otro realiti que vender a los borregos-sofá. Todo lo isntrumentalizan a una simble mercancia que vender . Lo adornan, lo manipulan ,lo envuelven y se lo endosan a las Tv.

Negocio redondo de estas productoras de la basura y la carroya. Que mas da, antes era el mundo rosa, los grandes hermanos, los supervivientes , copleros y triunfitos , que mas da. Todo es la misma mercancia.

Y como diria un silosofo... " Un millon de moscas , no pueden estar equivocadas. La m...... esta rica.

SALUDOS.

Gregorio Verdugo dijo...

Tizona: pues mercancía es lo último que debe ser el periodismo.